Ejemplos de deudas buenas para ganar dinero
Robert Kiyosaki, autor del libro “Padre Rico, Padre Pobre”, habla de dos tipos de deudas: deudas buenas y malas. Las deudas buenas son aquellas que generan ingresos, mientras que las deudas malas son aquellas que generan gastos.
Aquí te presentamos 6 ejemplos de deudas buenas: 🔎
1. Préstamos para invertir en bienes raíces
Si se utiliza para invertir en bienes raíces y generar ingresos pasivos, la deuda se considera buena. Los ingresos de los alquileres pueden superar los gastos del préstamo, generando un flujo de efectivo positivo.
2. Deuda empresarial
La deuda empresarial se utiliza para invertir en un negocio y generar ingresos a largo plazo. Si se administra correctamente, la deuda empresarial puede ayudar a expandir la empresa y aumentar los ingresos.
3. Deudas buenas para la compra de acciones
Si se utiliza para comprar acciones en una empresa que genera ingresos y paga dividendos, la deuda puede considerarse buena.
Sin embargo, es importante investigar cuidadosamente la empresa y sus perspectivas antes de tomar cualquier decisión.
4. Deudas buenas para invertir en una franquicia
Si se utiliza para invertir en una franquicia, la deuda se considera buena si la franquicia tiene un historial comprobado de éxito y genera ingresos a largo plazo.
5. Deudas buenas para la compra de equipos
Si se utiliza para comprar equipos que generan ingresos, como maquinaria o tecnología, la deuda se considera buena.
Los ingresos generados por el equipo pueden superar los gastos de la deuda, generando un flujo de efectivo positivo.
6. Deudas buenas para financiar un proyecto
Si se utiliza para financiar un proyecto que generará ingresos a largo plazo, como la construcción de una propiedad de alquiler, la deuda se considera buena.
🎯 Conclusión
Las deudas buenas son consideradas beneficiosas ya que permiten a los individuos y empresas obtener financiamiento para invertir en su educación, propiedad, negocios u otros activos. Los cuales pueden generar un retorno de inversión positivo en el futuro.
De esta forma, estas deudas a menudo tienen tasas de interés bajas y plazos de pago flexibles. Esto hace que sea más fácil para los prestatarios obtener el capital necesario para hacer crecer su patrimonio neto y mejorar su posición financiera a largo plazo.
Además, también pueden ayudar a mejorar el historial crediticio de una persona o empresa. Esta situación permite acceder a más oportunidades de financiamiento en el futuro.
En resumen, si se usan adecuadamente, las deudas buenas pueden ser herramientas poderosas para el crecimiento financiero y la creación de riqueza.